CARLOS HIDALGO Psicólogo clínico

Las sectas

EL PERIÓDICO MEDITERRÁNEO Artículo opinión 23/7/2023

LAS SECTAS

La semana pasada se desmanteló la secta La Familia del Alma, en un chalet de la Pobla tornesa. La Guardia Civil detuvo a tres personas por presuntos delitos contra la salud pública, asociación ilícita, intrusismo laboral, agresión sexual y revelación de secretos. Entre los detenidos, se encuentra la “maestra” de la secta, que tiene un blog sobre cocina energética y alimentación natural, donde recoge recetas y fotografías de los platos elaborados. Esta líder, afirma ser omnisciente (criatura de sabiduría ilimitada) y conocer la verdad absoluta, presentándose ante sus seguidores como la única persona que podía ayudarles a solucionar sus problemas. En su blog, se describía como diplomada en cocina energética, alimentación natural y macrobiótica, consejera nutricional y terapeuta emocional. La investigación comenzó, por parte de la benemérita, a partir de la denuncia de los padres de dos damnificadas. La edad de iniciación en una secta se sitúa en torno a los 20 años, y las víctimas suelen tener problemas de autoestima y un bajo estado anímico. Prácticas chamánicas con sustancias ilegales y derivados alucinógenos, chantaje emocional y persuasión coercitiva, son los métodos utilizados en una secta para destrozar la personalidad de sus miembros. El modus operandi de estos grupos para tratar de captar adeptos es muy similar en todos los casos, intentando llamar la atención mediante charlas y seminarios atrayentes (cursos de autoayuda o seminarios de crecimiento personal), mientras, una vez lograda la confianza de las víctimas, empieza la demanda de dinero para supuestos proyectos con los que ayudar a gente. Las sectas, a menudo, utilizan técnicas de manipulación psicológica para controlar y manipular a sus seguidores. Habitualmente, estas técnicas incluyen el aislamiento social, el control de la información, la manipulación emocional y la supresión del pensamiento crítico. Al explotar la vulnerabilidad de la persona, las sectas pueden ejercer un poder significativo sobre la mente de sus seguidores, siempre bajo un líder con carisma y gran poder de persuasión sobre sus seguidores. Desgraciadamente, como dijo Voltaire: “Cuando el fanatismo gangrena el cerebro, la enfermedad es casi incurable”. www.carloshidalgo.es

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