CARLOS HIDALGO Psicólogo clínico

Psicología del GEEK

La psicología del geek Hippies, mods, góticos, punks, heavies, nerds, hipsters… son términos que hablan de las diferentes modas o culturas urbanas que se han visto o pueden verse por nuestras calles. Son conceptos que se relacionan con fenómenos sociales y que suelen hacer referencia a un grupo de personas en la que se desarrolla un conjunto distintivo de creencias y conductas que les diferencia del resto de miembros de la misma sociedad. Por norma, estas tribus urbanas se suelen desarrollar alrededor de un estilo musical, de una ideología o bien de una afición común. Una de estas culturas urbanas que está creciendo con cierto vértigo es la cultura geek. La palabra geek hace referencia a aquella persona que presenta un elevado nivel de fascinación con todo lo relacionado con lo tecnológico, el ocio electrónico y la ciencia ficción, siempre bajo el denominador común el interés por la tecnología. Dentro del grupo de geeks podríamos encontrar varios subgrupos según la prioridad en cuanto a interés se refiere. Así, los hackers serían los geeks encandilados con los gadgets (pequeñas aplicaciones útiles) o los gamers (“jugones” de los videojuegos) serían los geeks interesados sobre todo por el ocio electrónico. Si bien el término en sus comienzos tenía una cierta connotación negativa, equiparada a un freaky o nerd, en la actualidad este concepto es visto cada vez con mayor aceptación y reconocimiento por parte de la sociedad, siendo muy valorada su cultura y habiéndose establecido incluso el día del orgullo geek (25 de mayo). De hecho, algunos estudios realizados respecto al nivel de creatividad, tanto a nivel de ocio como de trabajo, indica que los geeks tienden a realizar un mayor número de proyectos creativos que la media. www.carloshidalgo.com

El Síndrome de Asperger

Síndrome de Asperger El Director Gavin O’Connor es quien firma una interesante película que se encuentra ahora en cartel: El Contable. Ben Affleck interpreta a un contable con Síndrome de Asperger, categorizado en el nuevo Manual de Diagnóstico (DSM-V) como un Trastorno del Espectro Autista. Este es un trastorno neurobiológico del desarrollo que se manifiesta en determinadas dificultades relacionado con aspectos sociales, cognitivos y comunicativos. Lo cierto es que cada persona se ve afectada de manera desigual y muy distinta, aunque por lo general tienen características en común. Así, es frecuente encontrar un déficit en el manejo de las relaciones sociales, dificultad para interpretar la ironía, el sarcasmo y ciertas bromas (pues entienden el lenguaje de forma literal), falta de empatía, cierta torpeza motora, un abanico de intereses muy restringido y dificultad para afrontar cualquier cambio en las rutinas. Por otro lado, esa restricción de intereses, que muchas veces se acompaña de una gran memoria, hace que algunos sean auténticos expertos en algunos temas. Y es que ocasionalmente este Síndrome se da en concomitancia con una inteligencia superior a la normal, o con un talento superior en una o múltiples áreas específicas, a modo de savantismo. El Síndrome de Savant, también conocido como Síndrome del Sabio o savantismo, hace referencia a personas con habilidades cognitivas excepcionales, pudiendo hacer gala de una facultad cognitiva aumentada: desde una memoria fotográfica hasta la capacidad para escribir frases al revés a gran velocidad o hacer cálculos matemáticos complejos de manera intuitiva. No en vano, existen estudios que apuntan que personajes tan ilustres de la Historia como Isaac Newton, Albert Einstein, Nicola Testa o el propio Leonardo Da Vinci (considerado el ser mas inteligente que ha existido jamás), eran Aspergers con savantismo. www.carloshidalgo.es

la crítica

LA CRITICA Existe un dicho que dice lo siguiente: “Lo que Juan dice de Pedro, dice mas de Juan que de Pedro”. Y es que antes de criticar, deberíamos pensar en lo que la crítica dice de nosotros mismos, porque son numerosos los estudios que demuestran que lo que vemos en otras personas es lo que existe en nuestro interior. O lo que es lo mismo, proyectamos de manera inconsciente nuestra realidad sobre los demás, puesto que cuando algo no nos gusta utilizamos un mecanismo de defensa, la proyección, que nos hace atribuir a los demás sentimientos, emociones, creencias o acciones que nos resultan inaceptables. Si se es capaz de tomar conciencia de esa proyección se podría usar para conocernos mas y mejorar. Pero lo cierto es que, al ser doloroso, cuesta trabajo aceptar lo negativo de uno mismo. Nicolás Maquiavelo en su libro El príncipe ya dijo que los hombres juzgan mas por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero son pocos los que comprenden lo que ven. Debido a que la crítica casi siempre es una expresión de quiénes somos y de lo que pensamos, uno puede quedar completamente expuesto ante una persona inteligente. Por otro lado, también es cierto que hay un tipo de crítica deseable, la constructiva. En este caso la persona que critica es capaz de establecer cierto vínculo emocional con el otro, por lo que realiza la crítica desde la empatía. Estaría relacionado con el concepto griego de parresía (decirlo todo) que significa hablar con franqueza, buscando siempre el bien del otro, siendo el objetivo ayudar y motivar. En cualquier caso, siempre es mejor criticar menos y ayudar más, hablar menos y pensar más. www.carloshidalgo.es

genios de la historia

  GENIOS DE LA HISTORIA Recientemente se han descubierto ciertas variables que podrían ser claves para comprender el secreto de los genios de la humanidad. Así, hay tres características básicas entre todos ellos: poseer una gran inteligencia (era de suponer), tener un altísimo poder de concentración y una increíble capacidad para poder sumergirse en sus trabajos. Leonardo, Miguel Ángel, Marie Curie, Newton, Voltaire, Einstein o Bach, compartían esta capacidad de aislamiento y extrema concentración, llegando incluso a una sublime abstracción, difícil de encontrar en el resto de los mortales. Porque por lo visto, nadie ha pasado a la historia por demostrar un nivel de genio sin haber pasado una gran cantidad de tiempo concentrado en lo que se desea desarrollar, sea cual sea su campo (artístico, científico, etc.). Ser capaz de dominar la mente, dirigirla a una tarea específica, mantenerla en ella y vivirla con pasión, parece ser la llave de la sabiduría y la genialidad. Porque hay quien piensa que un genio nace, no se hace, que sencillamente tiene el talento para una actividad concreta y le basta con desarrollarla para alcanzar la excelencia. Pero esto además de simple, es una visión falsa de la realidad, porque aunque el talento es esencial, se necesitan otras características como ser curioso, impulsivo, crítico con su trabajo, empleando una considerable cantidad de tiempo en reflexionar acerca de lo que se quiere alcanzar, si se ha tenido éxito o no y, si no lo ha logrado, qué se debe hacer diferente, utilizando siempre un método ordenado dirigido a construir, sin importar el tiempo que se emplee, pues tienen una amplia capacidad para generar una autocrítica constructiva. Además, también son metódicos, sacrificados y disciplinados. Un último dato: trabajan siempre por pasión, nunca por dinero. www.carloshidalgo.es

el método dan-sha-ri

El método “Dan-sha-ri” Los nipones tienen fama de ser personas ordenadas. Una prueba de ello es el éxito que está teniendo el libro de Hideko Yamashita el método “Dan-sha-ri”. El significado de esta palabra se divide en tres partes: Dan (rechazar cosas innecesarias), sha (deshacerse de lo inútil) y ri (detectar lo insano de lo innecesario). Este novedoso método japonés sugiere ordenar la vida, entendiendo por la palabra vida todo: pensamientos, ideas, emociones, sentimientos, etc. Todo ello basándose en la idea de que deshacerse de lo inútil, bien sea un pantalón roto, un reloj que no funciona o un recuerdo doloroso, nos conduce a un estado de paz con nosotros mismos. Una de las reglas sobre el orden es la de la ocupación. Así, nunca se debe llenar un habitáculo mas del 80 %, sin importar si es un cajón, un armario, una habitación o nuestra cabeza, para no abarrotarlo de cosas innecesarias. Otra de las reglas es la del reemplazo, que no es otra cosa que seleccionar bien aquellas cosas que de verdad nos hacen feliz, limitándonos a ellas, y reemplazándolas siempre que aparezca una nueva que merezca ese lugar. ¿Quién no tiene un “cajón de sastre” donde dejar lo que al final nos resulta innecesario? Se trata por tanto de seleccionar y expulsar de nuestra vida objetos y relaciones que no nos aportan nada. Es bien sabido que al ordenar todo aquello material que nos envuelve, por ejemplo los trastos de casa, también ponemos en orden nuestro cerebro y emociones. Es por esta razón que cuando dejamos los espacios despejados, nos sentimos mejor con nosotros mismos y dejamos entrar la buena energía en nuestra vida, gozando de mejor salud mental y emocional. www.carloshidalgo.es

EGOISMO ENCUBIERTO

El egoísmo encubierto Siempre que se utiliza la palabra egoísmo, lo primero que acude a nuestra mente es una persona que no ve mas allá de su ombligo. Y en cierta forma es algo así, pues la palabra egoísmo proviene del latín ego (yo) e ismo (costumbre) entendiéndose como el excesivo aprecio que tiene una persona por sí misma, y que le hace atender desmedidamente a su propio interés. Es decir, alguien que piensa fundamentalmente en él mismo anteponiendo sus intereses a los demás. Además, les cuesta empatizar, ponerse en la piel del otro, porque interpretan los que se les dice tan solo desde su punto de vista. Es una obviedad decir que una conducta egoísta es un claro signo de inmadurez. Y no es menos cierto que todos somos en parte algo egoístas, pero como todo en la vida, todo depende de la frecuencia, si ocurre en momentos puntuales o mas bien forma parte de nuestra rutina. Existe también el término de egoísta razonable, referido a vivir de tal manera que los propios intereses no estén en desacuerdo con los intereses de los demás, dándose la satisfacción de nuestros deseos y también el de los otros. No obstante, existen otras formas de ser egoísta de manera encubierta, de forma mas sutil. Una de las mas comunes es aquella en que uno está contando su experiencia y, en la mínima pausa que uno hace, se escucha aquello de “a mi también me ha pasado…” mientras el otro aprovecha para contar su historia. Es una de las formas de egoísmo mas dolorosas, pues da la impresión de que no hay ningún interés por oír nuestra vivencia. Y es que  la mayoría de las veces lo único que queremos es que nos escuchen, pues sentirse escuchado sin censura, es ya un consuelo en sí. El único egoísmo aceptable es el de procurar que todos estén bien, para estar uno mejor. www.carloshidalgo.es

37

37 En unas semanas se estrenará en España una película titulada 37. Premiada en el Festival de cine ruso con el galardón al mejor film y al mejor director, 37 es un drama que cuenta como Kitty Genovese fue violada y asesinada, en un barrio de Nueva York, una noche de marzo de 1964. 37 fueron los vecinos testigos del drama de la joven de 28 años, sin que ninguno de ellos interviniera. La historia se conoció por el tesón de un experimentado periodista del New York Times quien investigó hasta la extenuación el crimen, titulando su artículo de esta sugerente manera: “37 vieron el crimen y ninguno llamó a la policía”. Existió el testigo número 38, quien si dio aviso a la policía, pero era tarde, Kitty Genovese había muerto. Esa falta de reacción de los vecinos fue estudiada y analizada por diferentes investigadores en psicología, bautizando como Síndrome Genovese a ese efecto de difusión de la responsabilidad. Hoy en día es mas conocido como efecto espectador (ya comentado en alguna ocasión), donde se sentencia que, al contrario de lo que pueda parecer, a mayor número de espectadores observando a alguien en peligro, menor es la probabilidad de que alguien asuma la responsabilidad de dar el primer paso para ayudar a esa persona. La explicación más común de este fenómeno es que, con otros presentes, los observadores asumen que otro intervendrá y todos se abstienen de hacerlo. El grupo hace que se difumine la responsabilidad. Y es que como dijo el escritor y filósofo irlandés Edmund Burke: “lo único necesario para el triunfo del mal es que los hombres buenos no hagan nada”. www.carloshidalgo.es

Nick Kyorgios

Nick Kyrgios El Masters 1.000 de Shanghái celebrado hace unos días, lo recordaremos siempre por la brillantísima actuación de nuestro Roberto Bautista quien eliminó en semifinales al nº 1 del mundo Novak Djokovic, cayendo en la final contra Andy Murray. Pero el torneo también se recordará por el último esperpento protagonizado por el tenista australiano de 21 años Nick Kyrgios. Este “enfant terrible” del tenis, nº 14 en la ATP, sorprendió durante el partido que celebraba contra Misha Zverev regalando un punto con un saque ridículo y estrafalario. El público reaccionó mal, y poco después Kyrgios mostraba su enfadó realizando gestos obscenos a un aficionado, mientras el juez de silla le advertía por su mal comportamiento. Pero esta no es la única espantada que ha realizado el díscolo jugador. Una de las mas sonadas la realizó el año pasado en Montreal cuando le espetó en pleno partido a Wawrinka: “Kokkinakis se ha acostado con tu novia, lo siento colega”. Todo se saldó con una multa. También fue tristemente protagonista en Cincinnati cuando, al perder su partido, se dirigió a su banquillo y rompió 3 raquetas en 10 segundos. Todo un record. La Asociación de Tenistas Profesionales, le ha sancionado con 8 semanas de ausencia en los circuitos, una multa de 40.000 dólares y la obligación de acudir a un psicólogo, todo ello como resultado de su mal comportamiento y de haber incumplido el código de conducta en Shanghái. Sin duda, el psicólogo le aportará la estabilidad mental de la que carece y el equilibrio interior del que adolece, pero siempre que Nick quiera, porque nada se puede hacer si no existe colaboración por parte del interesado. www.carloshidalgo.es

La vanidad

La Vanidad Es una evidencia que el ser humano es vanidoso por naturaleza, pero lo cierto es que hay gente altanera, muy altanera y luego está Amy Sharp. Esta joven australiana de 18 años se escapó de un centro de menores en Sídney (Australia). Para facilitar su localización, la policía emitió un comunicado en Facebook que incluía una foto suya, en la que aparece sin maquillar y con ojeras. Por lo visto a Amy no le gustó la fotografía que la policía había facilitado a los medios de comunicación y decidió enviar ella misma una en la que salía más favorecida. En la parte de debajo de la foto escribió: “Podéis usar esta foto, por favor. Gracias”. La contestación de la fugitiva tuvo más de 60.000 me gusta, convirtiéndose en noticia para webs de medio mundo. Además, miles de usuarios de la red social se pusieron en contacto con la policía para que respetaran los deseos de la delincuente y cambiaran la foto, algo que no sucedió. Al final, debido a la sobreexposición de las dos fotos, pues prácticamente toda Australia vio su cara maquillada y sin maquillar, las autoridades no tardaran ni un día en localizarla y detenerla. Y es que el término vanidad, proviene del latín vanitas, que es la cualidad de lo vano (vacío, hueco o falto de sustancia), por lo que se utiliza como adjetivo vinculado a lo insustancial, la presunción y el envanecimiento. Así, el vanidoso, como el caso relatado, no duda en destacar siempre que puede, buscando la admiración de quienes le rodean, aunque sean desconocidos. Con frecuencia, esta manifestación de soberbia encubre un sentimiento de inferioridad y una necesidad de aceptación. www.carloshidalgo.es

violencia doméstica

VIOLENCIA DOMÉSTICA Esta pasada semana, la Policía Local de Almazora detuvo a dos hombres por maltratar presuntamente a mujeres de su familia. Un arrestado es la pareja de la víctima quien comentó a los agentes que le estaba humillando, pegando y amenazando de muerte, hecho que continuaba haciendo incluso en presencia de la propia Policía. El otro detenido era el padrastro de una joven. Al llegar los agentes la encontraron llorando en el suelo con su bebé en brazos y relatando a los policías que desde hace tiempo recibe malos tratos de su padrastro, quien la ha amenazado en repetidas ocasiones con un cuchillo llegando a golpear al bebé durante las discusiones. Lo cierto es que los maltratadores pueden ser hombres o mujeres, aunque suelen ser más común en el sexo masculino. Entre las características que mejor les definen se encuentra la baja autoestima pretendiendo con la humillación que practican disminuir la autoestima del otro. Celosos, egocéntricos, amenazantes y controladores, evolucionan muchas veces hacia una personalidad psicopática intentando aislar a su víctima. En las personas que padecen el maltrato se da siempre un cuadro de dependencia emocional como resultado de un proceso prolongado de subordinación y maltrato. Una violencia que se repite en el tiempo continuadamente, puede permanecer como una secuela una vez finalizada la relación, influyendo en la víctima en sus siguientes relaciones de pareja, pues el estado psicológico causado por la cronicidad de la violencia sufrida, implica cambios en su personalidad que las hace más vulnerables a sufrir nuevas victimizaciones. Tanto es así, que existen estudios que comparan las reacciones de las mujeres maltratadas con las de prisioneros de guerra. www.carloshidalgo.es